Llama la atención por su sencillez en la realización, el poder comunicativo de sus dibujos, su apego al blanco y negro como una forma de contar una historia que merece grises más que color para ser contada. En ella se narra su educación como niña según los más avanzados modelos occidentales y el contraste con una nación que en lugar de avanzar, retrocede en su espíritu cultural.
No puede uno sino indignarse frente a la regresión social, producto del ascenso del poder religioso del Islam, que considera a la mujer como un agregado del hombre y una prostituta en potencia. En dónde religiosidad significa lamentablemente, oscurantismo y barbarie.
Se nos muestra claramente cómo Occidente empujó a la guerra entre naciones hermanas (Irán e Irak), vendiendo armas a ambas partes, esperando recoger pingues ganancias después de la confrontación que eliminaría la respuesta de grupos sociales o ciudadanos frente a las grandes corporaciones. No es, por otra parte, una simple historia política que nos indique la vía correcta y que se dedique a exponer en términos de ideología los desafortunados hechos históricos que han dado lugar al Irán de hoy día, país reglado por una moral más que rancia, pero que tiene el 4° lugar mundial en bloggers según la Wikipedia y un desarrollo nuclear creciente.
Hay una historia personal también en juego, vale la pena seguirla con atención, la de una mujer que busca su propio camino a través de extraños modelos occidentales e innecesarias doxologías que conducen a prácticas “revolucionarias”, que hacen retroceder el tiempo hasta la Edad Media.
Catherine Deneuve y su hija Chiara Mastroianni hacen las voces de madre e hija en la misma caricatura. La recomiendo ampliamente para ver en un fin de semana.
No puede uno sino indignarse frente a la regresión social, producto del ascenso del poder religioso del Islam, que considera a la mujer como un agregado del hombre y una prostituta en potencia. En dónde religiosidad significa lamentablemente, oscurantismo y barbarie.
Se nos muestra claramente cómo Occidente empujó a la guerra entre naciones hermanas (Irán e Irak), vendiendo armas a ambas partes, esperando recoger pingues ganancias después de la confrontación que eliminaría la respuesta de grupos sociales o ciudadanos frente a las grandes corporaciones. No es, por otra parte, una simple historia política que nos indique la vía correcta y que se dedique a exponer en términos de ideología los desafortunados hechos históricos que han dado lugar al Irán de hoy día, país reglado por una moral más que rancia, pero que tiene el 4° lugar mundial en bloggers según la Wikipedia y un desarrollo nuclear creciente.
Hay una historia personal también en juego, vale la pena seguirla con atención, la de una mujer que busca su propio camino a través de extraños modelos occidentales e innecesarias doxologías que conducen a prácticas “revolucionarias”, que hacen retroceder el tiempo hasta la Edad Media.
Catherine Deneuve y su hija Chiara Mastroianni hacen las voces de madre e hija en la misma caricatura. La recomiendo ampliamente para ver en un fin de semana.
2 comentarios:
Buen día: En otro tema, me da gusto saber que visitará la ciudad de Monterrey. Espero poder asistir al evento del cual estará acargo, organizado por REDES.
Gracias... allá estaré pronto con ustedes... saludos.
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